La falta de agua traslada a los productores a otras zonas. ASOC. ESP. DE FRUTAS TROPICALES

Entrevistamos a Javier Braun, el nuevo presidente de la Asociación Española de Frutas Tropicales, en sus oficinas de Vélez -Málaga, justo tras haber mantenido una reunión con el alcalde de esta localidad, el concejal delegado de Seguridad y miembros del Cuerpo Nacional de Policía, de la Guardia Civil y de la Policía Local. El objetivo, reforzar la vigilancia contra los robos de aguacates y aumentar las inspecciones del origen de estos productos en los espacios de venta ambulante. Uno de los numerosos frentes que tiene abiertos la asociación para el óptimo desarrollo del sector tropical español. Sin duda, uno de los sectores más prósperos en la actualidad y con excelentes expectativas de futuro, pero que, sin embargo, requiere de la unión de sus operadores para tener un mayor impulso.

“Trasvases o el uso de aguas residuales para riego son algunas de las soluciones que propone la asociación

Así, el principal objetivo de esta asociación es la obtención de la IGP con el fin de instaurar una normativa oficial que garantice la calidad del producto y otorgarle con ella una diferenciación frente a otros orígenes, además de poder acceder a fondos europeos para promoción, entre otras acciones. Mientras tanto, la Marca de Calidad, paso previo a esta IGP, ya es una realidad. “Centramos nuestros esfuerzos en potenciar el saber hacer de nuestros agricultores porque cuanta mayor calidad ofertemos, mayor reconocimiento y futuro tendremos en los mercados”, señala su presidente, quien añade la importancia de concienciar al agricultor para que no recolecte el producto en verde. Por ello, potencian la formación como base fundamental con jornadas técnicas, cursos y un proyecto con la Universidad de Málaga para la creación de un título propio de agricultura tropical.

Con todo ello, esperan que se sigan sumando agricultores a la asociación para aumentar su representación más allá de las 4.000 ha actuales.

El agua, el gran desafío
El problema del riego es el mayor de sus retos actuales en la provincia malagueña, que está limitando el crecimiento productivo y de superficie de los tropicales. Así, muchos operadores ya están desarrollando plantaciones en otras zonas españolas y en otros países como Portugal y Sudamérica. “Pedimos trasvases de agua excedentaria al pantano en invierno para tener mayor disponibilidad en verano o el uso de aguas residuales para riego y poder así aumentar nuestra capacidad productiva global, o al menos mantenerla”, comenta Braun. “La rescisión de agua vino cuando ya habían proliferado las plantaciones de aguacate en la zona y ahora la productividad está limitada, por lo que la Administración tiene que ofrecernos soluciones”.